¿Te preguntas qué ver en Asuán en 1 o 2 días? Asuán, situada en el extremo sur de Egipto, es una joya menos conocida pero igualmente fascinante. Esta ciudad a orillas del río Nilo combina belleza natural, historia antigua y la vibrante cultura nubia.
Aunque Asuán es más tranquila que otras ciudades turísticas como El Cairo o Luxor, tiene mucho que ofrecer para los viajeros que quieran explorar su rico patrimonio histórico y disfrutar de la serenidad de su entorno.
Asuán ha sido un importante centro comercial y estratégico desde tiempos faraónicos, controlando el acceso a las tierras nubias y sirviendo como punto clave en las rutas comerciales del oro y otros bienes.
Por qué visitar Asuán
Aswan, que es como también lo verás escrito, es una visita obligada si eres un amante de la historia y de Egipto. Hoy, es famosa por su mezcla de antiguas maravillas, templos impresionantes y su espectacular paisaje fluvial adornado con islas verdes y formaciones de granito.
Asuán ha sido una ciudad de gran relevancia histórica desde la antigüedad. En la época faraónica, era la puerta de entrada a Nubia y un importante centro comercial debido a su ubicación estratégica en el Nilo, lo que la convirtió en un punto clave para el intercambio de bienes como oro, marfil y esclavos entre Egipto y el África subsahariana.
Además, la ciudad proporcionaba el granito rojo necesario para la construcción de los obeliscos y monumentos más emblemáticos de Egipto, como los de Karnak y Luxor. Durante el período faraónico y más tarde bajo el dominio grecorromano, Asuán continuó siendo un centro militar y comercial crucial.
En la era moderna, la construcción de la Gran Presa de Asuán en el siglo XX marcó un hito histórico para Egipto. No solo transformó la economía del país al controlar las inundaciones del Nilo y generar electricidad, sino que también provocó cambios sociales y culturales, como la reubicación de miles de nubios.
Qué ver en Asuán en 1 o 2 días
La visita a Asuán la podemos dividir en 2 partes. Por un lado, las maravillas de la ciudad propiamente dicha donde encontramos varios lugares de interés imprescindibles. Pero en los alrededores, también en la provincia egipcia del mismo nombre hay otros lugares interesantes.
Al norte, de camino a Luxor, encontramos algunos templos que merecen una visita. Pero también tienes otros al sur, como el de Abu Simbel. Según los días que tengas, puedes estructurar las visitas de la siguiente forma:
Si solo tienes 1 día:
- Excursión por la mañana a Abu Simbel
- A la vuelta, visitar Asuán
- Si vas o vienes de Luxor aprovecha para visitar los templos del norte en el trayecto
Si tienes 2 días
- Día 1. Por la mañana haz la excursión a Abu Simbel y por la tarde disfruta de Asuán.
- Día 2. Templos de Kom Ombo y Edfú
Estos templos del norte también los puedes visitar si vas de camino de Asuán a Luxor para visitar esta ciudad o si estás realizando el típico crucero por el Río Nilo, que ya te lleva hasta ellos. Si no te quieres complicar, puedes contratar alguna de las siguientes excursiones:
- Excursión a Abu Simbel
- Excursión a la Presa de Asuán, el Templo de Philae y el Obelisco Inacabado
- Excursión a Edfú y Kom Ombo
Principales atracciones que visitar en Asuán
Comenzamos por los lugares de interés que puedes disfrutar en la propia ciudad de Asuán, Para ir de uno a otro lo mejor es que te muevas en taxi. Y si no quieres preocuparte de nada, pues la escursión que te hemos propuesto más arriba.
El Templo de Philae, la joya de Isis
Si os vale una opinión personal, a nosotros fue el templo de Egipto que más nos gustó en nuestro viaje. Muy superior a otros más famosos. No lo perdáis de vista.
Tu recorrido por Asuán debería empezar con una visita al Templo de Philae,
uno de los templos más bellos y mejor conservados de Egipto. Construido en honor a la diosa Isis, este templo tuvo que ser trasladado a la isla de Agilkia tras la construcción de la Gran Presa de Asuán, un increíble esfuerzo de conservación de la UNESCO.
El Templo de Philae está dedicado a la diosa Isis, diosa de la fertilidad y la diosa más venerada de la historia del antiguo Egipto. En cualquier caso no se puede hablar de este monumento como un sólo templo puesto que se trata en realidad de un conjunto de edificios que fueron levantados a lo largo del tiempo y dedicados a distintos usos y divinidades.
Consejos para visitar Philae
El templo solo es accesible en barco, y lo mejor es ir temprano en la mañana para evitar el calor y las multitudes. Cuando lo visites fíjate en las marcas de agua de sus paredes pues a veces cuando había crecidas el templo quedaba sumergido en el agua.
La Isla Elefantina
Tras la visita al Templo de Philae, sigue tu recorrido visitando la histórica Isla Elefantina, que alguna vez fue un importante centro de comercio entre Egipto y Nubia.
En esta isla se encuentran las ruinas del Templo de Khnum, el dios con cabeza de carnero, aunque queda muy poco del mismo y poco se puede decir de él. Además, puedes pasear por los tranquilos pueblos nubios que aún preservan sus coloridas tradiciones.
Un poco de mitología
Khnum, también llamado Jnum, moldeaba a los humanos con su torno de alfarero, hasta que rompió su rueda y comenzó a hacerla girar él. Pero se cansó y colocó en cada mujer una parte de ella para que desde entonces pudieron reproducirse sin su intervención.
El ambiente relajado de la isla y sus restos arqueológicos hacen que sea un excelente lugar para aprender sobre la historia de Asuán y la relación con la Nubia. Si te interesa la arqueología, no te pierdas el Museo de Asuán en la isla, que ofrece más detalles sobre la antigua civilización de la región.
El Obelisco Inacabado
¿Te has preguntado alguna vez cómo se construían esos majestuosos obeliscos que pueden encontrarse repartidos por todo Egipto? Pues si tienes la curiosidad, tienes que ir hasta el lugar donde se encuentra uno inacabado.
.Este gigantesco obelisco inacabado, que habría sido el más grande de todos los tiempos, se encuentra en la cantera de granito de Asuán. Abandonado por una grieta durante su tallado, el obelisco ofrece una fascinante visión de cómo los antiguos egipcios trabajaban la piedra a gran escala.
Por cierto, la cantera está expuesta al sol y puede hacer mucho calor durante el día. Ten cuidado con ello.
Museo de Nubia
El Museo de Nubia se encuentra a las afueras de Asuán, por lo que la mejor forma de ir hasta él es en taxi. Recuerda que en Egipto es habitual contratar taxis para todo el día, que te lleven de un lugar a otro y que te esperen durante tus visitas.
Para una mejor comprensión de la cultura nubia y la historia reciente de la región, el Museo Nubio es una parada esencial. Aquí, descubrirás cómo la construcción de la Gran Presa de Asuán afectó a la región y cómo las culturas nubias han sobrevivido y prosperado a pesar de los desplazamientos.
Como imaginarás, en Asuán hace mucho calor habitualmente por lo que este es un lugar perfecto para visitar durante las horas más calurosas del día.
Excursiones al sur de Asuán
Templos de Abu Simbel
Es una visita imprescindible a pesar de que se encuentra a casi 300km de Asuán. Hablamos de los Templos de Abu Simbel. Y sí, aunque se suele hablar en singular, en realidad son dos templos: el de Ramses II y el de Nefertari.
Abu Simbel es uno de los sitios arqueológicos más impresionantes de Egipto. El complejo fue diseñado no solo para honrar a los dioses Amón-Ra, Ra-Horajty y Ptah, sino también para glorificar al propio Ramsés y su reinado. El templo principal, dedicado a estos dioses y al faraón, está flanqueado por cuatro colosales estatuas de Ramsés II, que miden más de 20 metros de altura, simbolizando su poder divino y su dominio sobre Egipto y Nubia.
Curiosidades de Abu Simbel
Una de las características más destacadas de Abu Simbel es su alineación solar, un diseño arquitectónico que permite que, dos veces al año (el 22 de febrero y el 22 de octubre), los primeros rayos del sol iluminen las estatuas de los dioses en el santuario interior del templo, excepto la de Ptah, dios vinculado a la oscuridad. Este fenómeno astronómico es testimonio del avanzado conocimiento egipcio de astronomía y arquitectura.
El segundo templo, más pequeño, está dedicado a Nefertari, la esposa de Ramsés II, y la diosa Hathor, siendo uno de los pocos templos en Egipto donde una reina recibe el mismo tratamiento monumental que el faraón.
En el siglo XX, Abu Simbel fue rescatado de las aguas del Nilo cuando la construcción de la Gran Presa de Asuán amenazó con sumergir el sitio bajo el lago Nasser. En un esfuerzo de ingeniería sin precedentes, la UNESCO lideró una operación de rescate en la década de 1960, durante la cual los templos fueron cuidadosamente desmontados y reubicados en una colina cercana, a unos 65 metros por encima de su ubicación original.
Opinión personal
La historia de los Templos de Abu Simbel es fascinante y su visita es obligada pero su emplazamiento resulta demasiado artificial tras su traslado. Olvídate de ello y disfruta de un lugar único.
La Gran Presa de Asuán, Ingeniería moderna a gran escala
La Gran Presa de Asuán, construida en 1970, es una maravilla de la ingeniería moderna que transformó el curso del Nilo y la historia de Egipto. La presa creó el Lago Nasser, uno de los lagos artificiales más grandes del mundo, y permitió controlar las inundaciones anuales del Nilo.
Sin embargo, su construcción también provocó la reubicación de miles de nubios y la inundación de numerosos templos antiguos, entre ellos Abu Simbel, que fue trasladado como te hemos contado en el apartado anterior.
Visitar la presa es imprescindible para obtener una visión panorámica del Lago Nasser y aprender sobre su impacto en la economía y ecología de la región.
Excursiones al norte de Asuán
Al norte, a lo largo del Río Nilo, camino de Luxor encontramos dos templos que también merecen una visita. Si haces este crucero entre Asuán y Luxor visitarás ambos templos y te maravillarás con una experiencia única.
El Templo de Kom Ombo
Este impresionante templo, diferente a otros que podrás encontrar, está a solo 45 kilómetros al norte de Asuán. Se trata de un templo único en Egipto ya que está dedicado a dos dioses: Sobek, el dios cocodrilo, y Horus, el dios halcón. Su simetría y la ubicación junto al Nilo lo convierten en una parada impresionante en cualquier recorrido por la región.
El mito cuenta que Sobek era la encarnación del mal y por eso se representaba por un cocodrilo y Horus, su hermano, era la del bien y por eso se representaba por un halcón.
En Kom Ombo, también podrás visitar el Museo del Cocodrilo, donde se exponen momias de cocodrilos sagrados, que eran venerados en el templo.
Curiosidad
Debido a que este templo está consagrado a dos dioses distintos, se trata de un templo doble, es decir, tiene 2 pilonos, 2 salas hipóstilas, 2 patios y 2 santuarios. Los dos templos son paralelos estando las dos entradas en la fachada principal siendo el Sobek a la izquierda y Horus a la derecha.
El Templo de Edfu
Un poco más al norte, a unos 110 kilómetros de Asuán, se encuentra el Templo de Edfu, uno de los templos mejor conservados de todo Egipto.
El Templo de Edfu, dedicado al dios halcón Horus, es uno de los templos mejor conservados de todo Egipto y uno de los más grandes del país. Construido durante el periodo helenístico, entre 237 y 57 a. C., bajo el dominio de los Ptolomeos, este templo destaca por su impresionante arquitectura y relieves detallados que narran la historia de Horus, especialmente su mítica batalla contra Seth, el dios del caos.
Edfú no solo era un centro de culto religioso, sino también un lugar de festividades importantes, como el festival del «Triunfo de Horus», que conmemoraba la victoria del dios sobre su enemigo.
Conclusiones de nuestra visita a Asuán
Con solo 1 o 2 días en Asuán, puedes experimentar la historia, la cultura y las maravillas naturales de esta región única. Desde los templos antiguos como Philae y Kom Ombo, hasta las hazañas modernas como la Gran Presa de Asuán, Asuán ofrece una mezcla perfecta de tradición y modernidad. No te pierdas la oportunidad de conocer este rincón especial de Egipto, lleno de paisajes impresionantes, historia profunda y una vibrante herencia nubia.
Asuán fue nuestra puerta de entrada a Egipto. Allí llegamos en nuestro viaje que puedes en nuestro diario de viaje por Egipto. Fue el primer lugar en el que nos sorprendimos con una historia fascinante y una cultura milenaria.
Mucha gente no sabe si ir a Abu Simbel porque lo cierto es que hay que madrugar mucho (o casi ni dormir) porque por seguridad hay que ir en convoy y no se puede ir por libre. Pero haz el esfuerzo, que merece la pena. Nuestra recomendación es que vayáis en autobús, y no en avión que es otra de las opciones, porque solo así disfrutaréis de un amanecer en el desierto.
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